Caminos de Pesca

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La suerte que solemos tener los pescadores es que nuestros escenarios de aventuras suelen estar en parajes bellos y mágicos y en muchas ocasiones devoramos kilómetros para llegar a ellos, la sensación de abandonar la ciudad y alejarse a parajes más salvajes y menos transitados es especial, sientes como se alejan tus preocupaciones, tu rutina, tu trabajo... ves como el paisaje cambia con cada kilómetro que recorres y sabes que vas a evadirte por unas cuantas horas de tu día a día.

Esas carreteras por las que te alejas, esos pueblos que atraviesas, y esos caminos que te llevan a tu destino son sin duda uno de los grandes alicientes de la pesca, todas ellas son especiales pero siempre tenemos lugares y rutas predilectas.

En este caso es una pequeña carretera perdida en un valle, habitada por vacas, caballos y aguilas, poblada de brezos y pinos, una estrecha carretera en la cual cada metro es increible, una preciosa obra y un firme irregular que hace que sea más especial.

La carretera discurre por el valle y sube, haciendo del trayecto un espectáculo, curvas pronunciadas que se mezclan con estrechos pasos dónde discurren pequeños cauces de agua, cuando se corona el valle se disfruta de unas vistas donde se ve la carretera serpenteante entre las rocas, los pinos y los brezos, para finalmente abadonarla en un túnel creado por los árboles en sus últimos metros.

1 comentarios:

chagua dijo...

Muy buenas, amigos burgaleses, que tal se han dao los examenes?
Tenéis razón de que mientras nos dirigimos a los ríos donde vamos a pescar, atravesamos parajes tremendos. Aunque, la verdad, en esos momentos también uno está pensando más en la pesca, ilusionado y con esperanzas de tener un buen día.
un saludo y espero que hallan ido bien los exámenes.